El bloqueo y etiquetado, también conocido como LOTO (Lock Out, Tag Out), es un procedimiento de seguridad que se debe de implementar en cualquier instalación industrial. Con este proceso se garantiza que la maquinaria se encuentra debidamente apagada y bloqueada para realizar los trabajos de mantenimiento y así reducir los porcentajes de accidentes laborales fatales en las industrias.

Durante el mantenimiento de las máquinas, los encargados deben asegurar la maquinaria con los dispositivos de bloqueo adecuados para evitar que el equipo sea activado de manera accidental y que libere energía peligrosa almacenada.

Los empleados que revisan o mantienen máquinas o equipos pueden quedar expuestos a graves lesiones físicas o fallecer si no se controla adecuadamente la energía peligrosa. La OSHA (Occupational Safety and Health Administration) estima que cada año, se protegen aproximadamente 3.3 millones de empleados con la implementación de estas prácticas, las cuales han reducido fatalidades por activación inesperada de maquinaria en instalaciones industriales.

Los principales accidentes laborales que surgen de estos descuidos son:

•  Descargas eléctricas.
• Aplastamientos con una maquinaria en movimiento.
• Presión hidráulica y neumática.
• Quemaduras ocasionadas por gases o líquidos.

Al cumplir con el proceso de bloqueo y etiquetado se pueden prevenir unas 120 muertes y 50 000 lesiones cada año. Los trabajadores lesionados en el trabajo por exponerse a una energía peligrosa pierden en promedio 24 días laborales dedicados a la recuperación.